12 de junio de 2010

Ribéry y Gourcuff únicas esperanzas de Francia

La actual selección francesa está lejos de aquella liderada por Zidane que consiguió llegar a la final en el anterior campeonato del mundo. Aquel equipo contaba con jugadores muy importantes como Vieira, Thuram, Zidane, y un Henry muy en forma. En la actualidad, ya sea por el entrenador Doménech al que van dirigidas todas las culpas, o porque se trata de una selección plagada de veteranos que pasan la treintena, el equipo francés no tiene la autoridad y el poder que tenía hace pocos años. Por esta razón, la única esperanza de este equipo pasa por lo que hagan dos jugadores como Ribéry y Gourcuff. El primero es uno de los mejores jugadores del mundo.Rodeado de polémica en los últimos meses por sus escándalos sexuales, este jugador es capaz de desequilibrar cualquier partido con su velocidad, regate y técnica. El estado de forma y la concentración de Franck será vital. El otro ha conseguido llevar al Girondins de Burdeos a unos cuartos de final de la Champions. Se trata de un mediocentro elegante, al más puro estilo Zidane. Su juventud e inexperiencia implican que se dude de su capacidad para gobernar y dirigir a una Francia.

La no convocatoria de jugadores como Nasri o Benzema reduce aún más las posibilidades de contar con revulsivos que puedan cambiar el destino de una selección francesa a muchos años luz de aquella que logró el campeonato del mundo.
¿Cambiarán Ribery y Gourcuff su destino?

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